MARCO LITERARIO.
Se ha clasificado a Dostoievsky en el realismo. Esta
corriente, no trata de argumentar nada, simplemente muestra los hechos reales
(siempre situaciones negativas o marginales) desde un punto de vista subjetivo
y a veces amoral.
MARCO HISTÓRICO.
Es una época marcada por la revolución industrial
nacida en occidente y la revolución de ideas que esta trae consigo. Así, nace
el marxismo, que es adoptado por jóvenes intelectuales de todos los países, y
que en concreto en Rusia es censurado y prohibido por los zares.
Crítica de Dostoievski a la sociedad burguesa del
Siglo XIX:
Como en muchas otras obras de Dostoievski, en El
jugador nos encontramos con un personaje contradictorio. En este caso, esa
pasión es doble: por una parte, como se puede deducir por el título del libro,
está el juego; por otra, el amor. El autor esboza en esta novela corta un
retrato de un hombre hundido, moralmente inestable e incapaz de hacer frente a
su funesto destino por la debilidad de carácter; un hombre bondadoso, pero
cobarde. Aleksei Ivanovich, el jugador de la obra, es un preceptor que acompaña
en su viaje por Europa a un general ruso de alto copete, pero de escasos
medios. En el séquito de éste también viaja Polina Aleksandrovna, hijastra del
militar por la que el protagonista siente una pasión irrefrenable y violenta;
Polina, sin embargo, apenas le presta atención y le maneja a su antojo con muy
poca delicadeza. Dostoievski va construyendo con una narración directa y dura la desventura de un hombre que se deja
caer en la depravación por su incapacidad para afrontar los reveses de la vida.
El protagonista es maltratado por Polina y por el propio general, pero también
es apreciado por algunos otros personajes, como míster Astley o la tía del
militar, Antonida Vasilyevna. Su desgracia no sólo se fundamenta en la
incomprensión que recibe de otros personajes, como es el caso de Polina, sino
también en el desconocimiento de sí mismo. Aleksei, en verdad, es una marioneta
frágil que no tiene voluntad para evitar los errores. Como muchos jugadores, el
protagonista sufre rachas de suerte muy dispares, pero además desprecia las
salas de juego («[...] todo me parecía muy sucio, algo así como moralmente
sucio e indecente»). La insensatez parece tener mucho más peso en el alma de
Aleksei, por lo que sus pasos se encaminarán a una suerte funesta casi
prefijada, intuida desde el comienzo tanto por él mismo como por los que le
rodean. Una vez más, Dostoievski construye un personaje atormentado y frágil,
poseedor de unas virtudes nobles que, sin embargo, no son suficiente para
dotarle de humanidad.
Vocabulario.
-Croupier: El que dirige la mesa en los casinos.-Preceptor: Persona que tiene a su cargo la educación de alumnos individuales.
-Cronista: El que escribe la historia, al tiempo que ocurre.
-Lacrada: Sellada, cerrada.
-Candidez: Inocencia, ingenuidad.
-Voluptuosidad: Complacencia a los deleites sensuales.
-Decoroso: El que respeta, honra...
Crítica e infromación sacada de:
Lectura del libro El jugador
El rincón del vago
Entrada realizada por Alejandro Salvador Castaño y Juan Miguel Gómez Piñero
Una entrada muy valioso, muchachos. Pero me sigue faltando la conexión con vuestro proyeto. Decidme, cómo responde Dostoievsky, con esta novela, a vuestro reto?
ResponderEliminarAdemás, intentad completar las entradas con algo de material multimedia, como imágenes, vídeos u otro material relacionado con el autor, su obra...
Seguid trabajando así, que es el camino correcto.